Nazarenos
El cofrade es: Un cristiano de fe sencilla y práctica. Debe estar en primera fila en su parroquia y en su cofradía, dispuesto a ayudar a todos, en obras de apostolado y vida religiosa.
Un enamorado de sus Cristos y de sus Vírgenes. Adora y vive a un Cristo humano, que lleva en su cartera, en su coche, en su casa. Y le reza porque lo tiene a mano y le habla como a un íntimo amigo, con la candidez y la pureza de un niño.
Ama a su Virgen de una manera posesiva: Mi Virgen. Su Virgen es partede diario vivir, le acompaña, le ayuda y le protege siempre. Es Madre y Amiga, por eso le aplaude y echa piropos cuando la pasea por las calles.
Los Cofrades Nazarenos, que acompañan a estas imágenes se comprometen a hacer el sacrificio enorme de no volver la cara, no hablar, obedecer ciegamente al celador que entre las filas va ordenando el desfile, sacrificio con el que, poniéndolo junto al de Cristo, se sienten que una parte, pequeña sí, pero activa, coadyuvan a la redención que Él nos consiguió, para extenderla a los hermanos que necesitan que ella les alcance.
Cuando ves pasar a estos hermanos vestidos con el incómodo y molesto hábito de nazareno, piensa que te están explicando en un sermón silencioso, además de aquello, el agradecimiento a Cristo, por su pasión y muerte que nos libró de la esclavitud del pecado y el reconocimiento del papel de la Virgen María en la salvación del mundo. Rodeándola, dejarían de ser andaluces si no lo hicieran, de flores, de alegría, y de riquezas, haciéndonos desear la venida de un Jesús glorioso y resucitado que nos abra a todos, el disfrute y goce de la vida que tiene reservada a los suyos.